El reconocido diseñador italiano Giorgio Armani, figura indiscutible y considerado el “rey” de la moda italiana, falleció este jueves a los 91 años en Milán, rodeado de su familia y de Leo Dell'Orco, su compañero durante las últimas dos décadas, informó su grupo empresarial.

Conocido mundialmente como “Re Giorgio”, Armani convirtió el concepto de la elegancia discreta en un imperio valorado en miles de millones de dólares. Su trabajo colocó a la mujer y su libertad en el centro de la moda, creando estilos caracterizados por su atemporalidad y refinamiento.

Armani fue pieza clave en la democratización de la alta moda en Milán, estableció un nuevo estándar de sofisticación en las alfombras rojas y llevó su visión a la gran pantalla, diseñando los icónicos trajes de American Gigolo en 1980. Esta colaboración consolidó su proyección internacional y fortaleció su relación con celebridades de todo el mundo.

“Con profundo pesar, el Grupo Armani anuncia el fallecimiento de su creador, fundador e incansable impulsor: Giorgio Armani. Il Signor Armani, como siempre lo llamaban con respeto y admiración sus empleados y colaboradores, falleció en paz, rodeado de sus seres queridos. Incansable hasta el final, trabajó hasta sus últimos días, dedicándose a la empresa, a las colecciones y a los numerosos proyectos actuales y futuros”, señaló el comunicado oficial de la firma.

En junio de 2025, Armani se ausentó de los desfiles de la Semana de la Moda de Milán debido a una enfermedad no revelada. Tras cumplir 91 años en julio, agradeció públicamente el apoyo recibido y expresó su intención de retomar actividades en septiembre, un regreso que no llegó a concretarse.

La empresa indicó que Armani trabajaba en un evento especial para conmemorar los 50 años de la marca durante la próxima Semana de la Moda de Milán. Se prevé que este fin de semana se instale una capilla ardiente en Milán para permitir la visita pública, seguida de una ceremonia privada en fecha aún por confirmar.

Hasta su fallecimiento, Armani se mantuvo como propietario y director creativo de su casa de moda, supervisando personalmente cada colección y manteniendo la coherencia estética de la marca, algo poco común en una industria dominada por conglomerados internacionales. Su firma reporta ingresos anuales de alrededor de 2.300 millones de euros, mientras que Forbes estimaba su patrimonio personal en unos 12.000 millones de dólares.

El legado de Giorgio Armani trasciende la moda y alcanza la cultura visual, el cine, la decoración y la hotelería de lujo. Su influencia definió el estilo de varias generaciones y consolidó a Milán como una de las capitales mundiales de la moda.